Macho peruano que se respeta en tiempos de coronavirus

Junto a las alarmantes cifras de feminicidios en tiempos de coronavirus, las declaraciones de algunas celebridades demuestran que, ni durante una pandemia mundial, el “macho peruano que se respeta” descansa.
El aislamiento social obligatorio ha puesto sobre el tapete -una vez más- que el Perú es un país machista. Como evidenciamos en un artículo anterior, el machismo es aún más latente en tiempos de coronavirus. En la gran mayoría de hogares de Lima, lamentablemente, las mujeres asumen al 100% las labores domésticas (carga que suele sumarse a sus responsabilidades laborales).
El machismo también ha quedado evidenciado en cifras de terror. Según reporta el portal feminista Mano Alzada, hasta el momento 10 mujeres han sido asesinadas durante el Estado de Emergencia. Lamentablemente, el coronavirus no solo ha puesto sobre el tapete una realidad que ya conocemos bien, sino también ha evidenciado actitudes machistas y retrógradas de varias celebridades.
Celebridades en cuarentena
Hoy más que nunca las celebridades se conectan con sus seguidores a través de las pantallas. Ya sea cocinando y/o haciendo otra actividad, Instagram se ha convertido en un puente entre los artistas y sus fanáticos.
El coronavirus nos ha traído momentos mágicos como el concierto virtual y gratuito de Chris Martin en casa, la ‘juerga’ de Meryl Streep por Zoom (que gracias a Dios hemos podido ver en Internet), un video benéfico dirigido por We The Lion en el que participan varios artistas peruanos, entre otras joyas de cuarentena.
Sin embargo, este tiempo en casa también ha puesto sobre el reflector mediático algunas actitudes machistas de distintas celebridades.
Uno de los nombres que más ha sonado en Twitter es el del cantante canadiense Michael Bublé, quien mostró cuestionados gestos en diversos videos en vivo que subió a Instagram junto a su esposa, la actriz argentina Luisana Lopilato.
Como menciona el diario argentino La Nación, “se viralizaron extractos de algunos vivos de la pareja en los que el cantante canadiense se mostraba molesto por conductas de su esposa, y otros en los que reaccionaba bruscamente tomándola del brazo o apartándola de manera muy notoria”.
Lo cierto es que, a pesar de que Lopilato defendió a su esposo en un video, sus fans no han quedado nada contentos con los videos y continúan analizando con pinzas las interacciones de la pareja.
Macho peruano que se respeta
Yendo al plano local, vale la pena mencionar el video que subió el influencer peruano Patricio Parodi, en donde le revienta un huevo en la cabeza a su enamorada, Flavia Laos, durante un TikTok.
Si bien ambos dejaron en claro que todo era una broma, lo cierto es que al ser figuras mediáticas (entre los dos tienen más de 5 millones de seguidores), sus acciones tienen consecuencias. ¿Cuántos niños y/o jóvenes que los siguen podrían creer que reventarle un huevo a una mujer en la cabeza -mientras está distraída desayunando- es algo normal y “divertido”?
De todas las perlas machistas que han surgido esta cuarentena, la que más me llamo la atención fueron las palabras del futbolista peruano Paolo Guerrero en un live que tuvo con Jeffersón Farfán hace unos días. La conversación entre los dos fue la siguiente*:
-“Cuando Alondra hace novelas y la ves en escenas difíciles, ¿te molesta?”, pregunta Farfán.
-“No estaría con ella. Si tiene que hacer esas escenas de besos, ahorita yo no tendría que estar con ella”, responde Guerrero. “Obviamente macho que se respeta”, añadió.
Lamentablemente, Guerrero es uno de los futbolistas más queridos del Perú: tiene casi 4 millones de seguidores en Instagram, contratos con algunas de las marcas más grandes del país y fue uno de los artífices de que el Perú llegara al mundial después de 36 años.
Sin embargo, todo esto parece diluirse en un vaso de agua con sus declaraciones. No solo demuestran que el deportista no conoce las características de un oficio como la actuación (en donde un beso en la pantalla, evidentemente, es una simulación y no un sentimiento real), sino también evidencian que él le pone condiciones al futuro profesional de su pareja.
Si el día de mañana tu novix te dice que por las características de tu trabajo no puede seguir contigo, debes saber que no es tu culpa. Nadie debe ponerte condiciones para estar en una relación. Aunque sí es cierto que no todos los actores acceden a besar a sus coprotagonistas en las pantallas y lo establecen como una cláusula laboral, esta decisión debe venir por parte del actor y no debe ser una decisión de su pareja.
Como bien describe Mano Alzada, con sus palabras Guerrero demostró que “muy poco le importa el desarrollo profesional de su compañera en el mundo de la actuación, en donde ella, bajo el condicionamiento de él, se encuentra limitada a actuar en escenas que involucran besos”. Urge que en estos días cuestionemos si, nuestros ídolos e influencers, no son de barro.
*Conversación publicada en el diario Publimetro el 20 de abril de 2020.