¿Lista para correr? ¡5 cosas que debes saber para empezar ya!

Empecé a correr casi de casualidad. Me mudé a Miami y no tenía un gym cerca, así que hice lo que me pareció más fácil: ponerme las zapatillas y salir a la calle. Primero fueron 3 km, luego 5 km y, eventualmente, llegué a 8 y 10 km. En todo ese tiempo me di cuenta que correr era casi como una terapia activa y sin querer le fui agarrando el gusto.
Después de 3 años, decidí correr mi primera media maratón: 21 km se veían infinitos, pero estaba decidida a hacerlo. Armé un plan de entrenamiento 100 días antes de la carrera y digamos que no me fue mal. ¡La terminé! Ese fue de los momentos más emocionantes de mi vida. Nunca antes había cruzado una meta así y pensé “yo tengo que correr una maratón algún día”.
Ese día llegó el 2019, cuando decidí correr mis primeros 42 km. ¡Me preparé 4 meses! Cada semana era un nuevo reto donde aprendía más sobre mis capacidades, limitaciones, sentimientos y donde pasé varias horas de conexión conmigo misma (quizás lo más increíble de toda esta experiencia). Mi objetivo era llegar a la meta más allá de los tiempos, ¡y lo logré!
Aprendí que si 42 km, o en realidad cualquier distancia nueva para una persona, puede parecer algo casi imposible, ¡sí se puede! Con ganas, entrenamiento y dedicación eres capaz de cruzar cualquiera meta. Por eso te quiero dar algunos consejos si quieres empezar correr o si buscas mejorar tus distancias.
1. Empieza de a pocos y no te compares
Nadie nació sabiendo caminar, ¡mucho menos correr! Si nunca has corrido antes, pero es algo que te llama la atención, ten paciencia y empieza de a pocos.
Ponte metas que sean alcanzables según tu condición física. Una buena idea es empezar intercalando: caminar una distancia y luego trotar otra, luego caminar nuevamente y así sucesivamente. Otra opción es trotar lentamente y optar por medirlo por tiempo o kms. Más allá de tu estrategia, hazlo disfrutándolo y a conciencia.
2. No corras con el celular en la mano
Esto puede ser de lo más incómodo que hay, por no decir “estresante”, para el brazo que lo está sosteniendo. Al agarrar el teléfono estamos ejerciendo una constante tensión y esto puede favorecer a dolores y contracciones musculares en la muñeca, codo, hasta hombros y cuello.
Además, te expones a ser víctima de ser asaltada algún sapo que pase por ahí. Te recomiendo busques bolsitos deportivos para guardar tu celular y así olvidarte del problema.
“A veces no le damos la importancia que merece, pero hacer estiramientos de manera rutinaria ayuda muchísimo a evitar contracturas y posibles lesiones”.
3. Hidrátate bien
¡Antes, durante y después! El agua es clave para evitar la deshidratación, mantener nuestra temperatura corporal balanceada y evitar calambres. La gran mayoría de personas solo toma agua al terminar de ejercitarse, pero lo que consumas antes y durante el ejercicio también influye. Eso sí, es importante que vayas probando y conozcas tu capacidad de tolerancia para que no sientas que ingieres mucha agua.
4. Hazle mantenimiento a tu máquina
Es sumamente importante el calentamiento previo y el estiramiento post running. A veces no le damos la importancia que merece, pero hacer estiramientos de manera rutinaria ayuda muchísimo a evitar contracturas y posibles lesiones por contracturas. Además, es importante que te hagas un chequeo con algún fisioteraputa para que pueda constatar que tu equilibrio muscular está en su punto.
5. Elige unas buenas zapatillas
Más allá de la pisada, tener unas zapatillas cómodas y que te den estabilidad y soporte, es clave. Trata de elegir unas zapatillas con las cuales te sientas cómoda porque finalmente las usarás bastante. Eso sí: ¡no corras una carrera con zapatillas nuevas! Siempre usa zapatillas con las cuales ya hayas hecho una buena cantidad de kms para evitar ampollas, heridas y lesiones.